lunes, 31 de marzo de 2008

Una muerte es una vida

Hoy fue el último dia de dolor para ella y el primero de los nuestros, los que la extranamos. Era el vínculo con todo lo femenino, la madre, la familia, los recuerdos de infancia. Me faltaron millones de abrazos por darle y ahora solamente puedo escribirlo. Estas pérdidas generan en mi una sensacion angustiosa y profunda de soledad. Necesaria. Tambien un dolor de garganta que comenzó por querer contener el llanto y esta degenerando en amigdalitis. ¿Cuantas lágrimas son suficientes? Este blog esta hecho en morados y rosados por que eran los colores que mas le gustaban. desde chiquita me contestaba que el lila era su color favorito. Mi abuela era una referencia para mi y una de las personas mas importantes en mi vida. Tengo fiebre, siento escalofrios y el dolor de cabeza me obliga a parar aquí mismo. Somatizo. Jaan atiende a los hijos de la hija de la hija de la vieja. Ya no la vere nunca, nunca más.

2 comentarios:

solartevasquez dijo...

pero queda la memoria de su generosa vida, la que proyectó sobre sus queridos hijos y nietos. Su permanente y agradecida referencia al amor que le prodigó desde que ud. llegó a su vida y la embelleció, de la misma forma que ella embelleció la suya.

Anónimo dijo...

Mami, aprovechemos que salió el sol para secar la ropa.
No es el sol el que seca la ropa. Es más el viento que el sol. El sol le da el olor.